Todo comenzó cuando un antepasado de la familia Prada convencido de la nobleza de la variedad godello, planta la primera peza de godello en el año 1885, sobre las altas laderas pizarrosas de las colinas en el valle del Sil.
El espíritu bodeguero de la familia tiene su origen en un entrañable personaje, José Ramón Gayoso, viticultor de Portela. Este viticultor planta el primer viñedo íntegramente con la variedad Godello, convencido del potencial de esta variedad autóctona de Valdeorras y en contra de las corrientes de la época. Poco a poco se fueron ampliando esas plantaciones de pequeñas parcelas Pezas, eligiendo las mejores localizaciones, en los alrededores de Portela. Años más tarde, muchas de estas parcelas fueron vendidas a otros viticultores, permaneciendo sólo en propiedad la finca de Pedrouzos.
Pero en el año 2001, la rama joven de la familia, comenzó a recuperar aquellas pequeñas piezas que habían pertenecido a su familia varias generaciones atrás, animada por las posibilidades de la variedad y las particularidades de la comarca valdeorresa, y contagiada de la ilusión de aquel primer viticultor, que en contra de las tendencias de la época, plantó la finca más vieja de godello que hay en Galicia en la actualidad: Pedrouzos. Todas las pezas de godello que fueron plantadas por la familia en el pasado, han sido recompradas y reintegradas al patrimonio familiar. Gracias a esta labor de recuperación, hemos podido llevar a cabo nuestra propia selección clonal y poner en práctica técnicas poco habituales en la viticultura gallega, como es el trabajo con cubiertas vegetales.
Hoy en día gracias a un patrimonio recuperado y a un equipo de excelentes profesionales, hemos conseguido elaborar vinos que reflejan el origen y la variedad, elegantes, potentes y con una personalidad inconfundible.